Por fin termino la navidad, aleluya! El día de Reyes es habitual que de una u otra manera acabe cabreandome en mayor o menor intensidad o al menos sintiendo la rabía que he sentido hoy al ver que mi regalo era ropa que compre yo mismo hace 3 días mientras mi Sr. Padre casi daba palmas con las orejas al ver el peazo recopilatorio del 111º Aniversario de la discográfica de Deutsche Grammophon con sus mejores grabaciones o mi Sra. Madre se probaba encantada de la muerte el collar que estuve buscando un buen rato en los grandes almacenes junto al maldito y siempre atestado stand del osito ese que deberiamos asesinar. Para rematar tuve que escuchar de boca de mi Sra. Madre que es muy complicado regalarme algo, claro que es complicado cuando ni le pone ganas ni imaginación y ni se molesta en salir de dos secciones de los grandes almacenes. Añadimos que mi a Sr. Padre lo de los regalos le parece una chorrada y encima te dice que no entiende tu enfado, pero bien que me hace hervir la sangre la de vueltas que he dado para sus regalos en los últimos años y lo que ha disfrutado con ellos (camara digital, CD para el coche, libro de fotografias de Madrid, libros variados, discos variados...). Y mejor no hablo de la dichosa costumbre que tienen de aplicarme el 1x2, es decir, un solo regalo por reyes y mi cumpleaños ya que soy un capricornio afortunado pringado del 8 de enero.

La parte friki es que mi padre me ha financiado digo regalado un lector de DNIe y he estado un rato configurandolo. En mi MacBook con Snow Leopard funciona a las mil maravillas gracias a un tutorial que publicarón en Pencadores, mientras en el sobremesa de Sr. Padre con XP con Internet Explorer 7 hace cosas raras, mientras con Firefox va como un tiro. Volviendo al tema reyes, este año no ha llegado la sangre al rio como el año en que le dije a Sra. Madre abiertamente que si pensaba que me iba a poner semejante mierda de jersey y que podía devolverlo, pero no he podido evitar que me invadiese la rabía. El lado bueno del día es que un embajador del lado escindido de la familia ha venido a traerme el libro "Los objetos nos llaman" de Juan Jose Millas.

Ahora la parte divertida del día es que este año la Srta. Beckham ha querido ser la primera en felicitarme el cumpleaños, pero en un patinazo mental lo ha hecho 24 horas antes de lo que corresponde, jajajaja. Así que estais avisados, no olvideis comprarme un regalo felicitarme.

Por cierto, mi revista Hola personal esta muy animada y el día menos pensado me sacan en portada unas fotos robadas en las que aparezco con un osito adorable con el que me relaciono, mientras en las páginas interiores desgranan la vida, obra, milagros y polvos de cada uno, al tiempo que resuelven las incognitas sobre nuestra boda, luna de miel y vida en común. Le pondremos banda sonora de Mecano. Y a todo esto, todavía no he decidido que pseudonimo le pongo a mi tocayo.

Otro cabreado con el día de reyes: Hidroboy.

Despistaos - Una rosa es una rosa